Roboam, pintura antigua de Rey Judío

Esta pintura hace parte de una serie que muestra los retratos de los reyes o profetas de los antiguos Reinos Judíos, mencionados en el Antiguo Testamento. Aparte de su iconografía, se pueden identificar porque aparecen sus nombres como parte de la pintura: Jehv, Joakim, Roboam, Haza y Abias.

En la época de la colonia y hasta principios del siglo XIX, era muy usual, en las instituciones y escuelas de arte local (principalmente en conventos de las diferentes comunidades religiosas católicas) el uso de grabados como referentes para la producción pictórica de la época.

Se ha encontrado un grabado idéntico a la pintura de Jehv (Jehú) que pudo haber transitado por América Latina y fue referente para pintores locales.

Esta pintura hace parte de una colección particular, que fue creada a mediados del siglo XX, con diferentes obras de arte y objetos que provienen de diferentes lugares de Europa y América. 

La pintura no se encuentra enmarcada, presenta oscurecimiento por oxidación y algunos quiebres en el óleo, con pérdidas en la capa pictórica en su contorno y craqueladuras en diferentes zonas.